BHP potenciará su capacidad fundidora y refinadora en Australia, ¿y Chile en qué está?

El pasado 3 de febrero, en la Revista Digital Minera Redimin, se publicó una noticia respecto a una gran inversión que realizará BHP para expandir su capacidad de fundición y refinería. Con 40 millones de dólares contemplados, esta inversión busca duplicar la producción de cobre fino de la empresa transnacional. Con esto, BHP superará las 500.000 toneladas anuales de cátodos de cobre para inicios de la próxima década.
Esta inversión, se realizará en Olympic Dam, cuarto yacimiento de cobre más grande del mundo, ubicado en el sur de Australia, propiedad de BHP. Además de llegar a las 500.000 toneladas en 2030, se piensa llegar a mediados de esa década a las 650.000 toneladas, lo que representa más del doble de las 322.000 toneladas que produce actualmente dicha empresa.
Este proyecto, tiene por objetivo aumentar la competitividad de BHP en el mercado global de cobre. La empresa transnacional, comprendiendo la importancia de este metal para la industria de electromovilidad, ha decidido potenciar su capacidad de fundición y refinería, para quedar a la vanguardia de la industria mundial.
¿Y Codelco en qué está?
En el caso de Codelco, ya hace un par de años, específicamente en 2022, el Sindicato Chuquicamata impulsó la Propuesta para el Fortalecimiento de la Capacidad de Fundición-Refinería en Chile desde Chuquicamata. Esta propuesta, se localiza en Chuquicamata, dadas las características de dicho yacimiento que, además de ser el más grande del mundo y el más importante de Codelco, posee instalaciones únicas para el tratamiento de cobre, estando ubicada su fundición en un lugar estratégico, acompañada de una refinería de última generación, con capacidad para procesar 750 mil toneladas de ánodos de cobre.
Al poseer una gran refinería, Chuquicamata se posiciona como un lugar ideal para crear esa “megafundición” que se ha hablado desde años en Chile, todo relacionado a la Estrategia Nacional de Fundiciones impulsada por el Gobierno.
Actualmente, este proyecto ha sido recogido y es impulsado por la Federación de Trabajadores del Cobre.
El ejemplo de BHP
Respecto al proyecto de BHP, son varias las cosas que llaman la atención, siendo una de las principales el ejemplo que da BHP al potenciar su fundición y refinería en un país desarrollado. Sobre ello, estamos convencidos de que las mismas exigencias ambientales que se tienen en países más desarrollados, en Chile estamos en condiciones de cumplirlas.
Si a ello le sumamos que, en pleno centro de Hamburgo, Alemania, existe una fundición que funciona a tope y que es hermana de la fundición de Chuquicamata (dado que su proceso productivo es el mismo), ¿no es esto una señal más que clara de que los países desarrollados potencian su capacidad de fundición, dado que aquel negocio es estratégico para sus intereses?
Así mismo, el que fundiciones de gran envergadura estén en países desarrollados, es una señal de que la tecnología está al servicio del medioambiente, comprendiendo que es imposible que una industria potencialmente contaminante funcione de forma tan normalizada en países en los que el tema medioambiental es norma general, al igual que en Chile.
Pareciera ser que, al contrario de lo que ocurría en el siglo pasado, las fundiciones van retornando a los países desarrollados. Estas ya no son solo paisaje de los países tercermundistas, debido esto a los avances tecnológicos, sumado a la importancia geopolítica y económica que conlleva tener en el propio país a fundiciones funcionando a tope.
En el caso chileno, según comenta Hernán Guerrero Maluenda, presidente del Sindicato Chuquicamata, nuestro país ha visto disminuida su capacidad fundidora, involucionando hacia la venta de concentrado de cobre, el cual es “altamente contaminante debido a que la huella de carbón para su traslado desde los yacimientos chilenos hacia China, Alemania o Australia, como sucederá ahora con Escondida, uno presume, hace que la contaminación ambiental sea mucho más nociva que si se fundiera el cobre chileno en nuestro país, más aún, tomando en consideración que hay tecnología de punta para fundir cobre con cero emisiones”.
“El proyecto de BHP, en el fondo, es lo mismo que nosotros propusimos en nuestra Propuesta para el Fortalecimiento de la Capacidad de Fundición-Refinería en Chile desde Chuquicamata. Ellos invirtieron y eso es precisamente lo que levantamos. Nuestra propuesta, junto con aumentar la capacidad fundidora de Chuquicamata, llegando a las 2 millones de toneladas, también contempla implementación tecnológica para reducir al mínimo las emisiones, adaptándonos a la norma chilena y, por tanto, contribuyendo a un medioambiente más sano”, complementó Guerrero.
“Debemos entender que el mundo está avanzando hacia la electromovilidad y que, por ello, la demanda de cobre aumentará año a año. Por esta razón, es que Chile debe posicionarse a la vanguardia y debe fundir su cobre en este país, o al menos Codelco debe vender solo cobre fino y no concentrado. Recordemos que el concentrado de cobre, además de tener este mineral, posee un sinfín de otros minerales, lo que hace que, con su venta, se pierdan miles de millones de dólares en recursos para el Estado de Chile, dado que su tratamiento conlleva la recuperación de otros minerales, además del cobre. Si vemos que, incluso, Donald Trump ha pedido a Ucrania la entrega de tierras raras a cambio de continuar con la ayuda militar de EEUU hacia ese país, entonces el mensaje es claro: Chile debe procesar todo su concentrado, si no quiere perder esta oportunidad única que se presenta debido a este boom en la electromovilidad”, finalizó el presidente del Sindicato Chuquicamata.